¿Quién no tiene problemas gestionando su equipo o empresa? Es que realmente no es fácil de llevar a cabo. Además, que hay que entender que es un tema tan importante que puedes llegar a desequilibrar una compañía, esto no es sencillo, aunque desde fuera parezca que sí.
El principal problema o
dificultad que nos encontramos somos nosotros, es decir, las personas o mejor
dicho la interrelación que existe entre las diferentes personas. Si en una
empresa se nos valora por nuestro rendimiento personal, es decir, individual,
ahí no hay tu tía, dependes de ti mismo y ahí si tienes un control total sobre
lo que haces, vamos que tú te lo guisas y tú te lo comes. Pero cuando la
gestión no es solo de tu persona, sino que tienes que gestionar un equipo, y no
solamente eso, sino que tienes que sacarle rendimiento al mismo, entonces el
cuento cambia, ahí ya no solo dependemos de nosotros, también dependemos del
trabajo de otras personas, y esto no es tan sencillo de controlar, incluso a
veces imposible, pero lo que sí podemos y debemos es dirigirlo, es ahí donde
veo claro que podemos aportar.
Me acuerdo de la primera vez que
me dijeron, ese es tu equipo de gente, ya puedes empezar la obra, ahí lo
primero que pensé fue “trágame tierra” un chavalito de veinti pocos, siendo el
supervisor de hombres hechos y derechos, y yo todavía un pipiolo que no sabía
hacer la O con un canuto, vamos que veía que me iban a comer vivo, hay lo que
yo vi y noté en primera persona fue que necesitaba el desarrollo más que
urgente de unas habilidades que en ese momento no poseía o si las poseía, no
las tenía en absoluto desarrolladas, además de empezar a descubrir que existen
unas herramientas que facilitan un montón esta labor. Lo primero que aprendí es
a construir el equipo, a motivarlo, a comunicarme con ellos de un modo más
efectivo, con lo que consigues mostrar tu liderazgo de y coordinación para que
todos rememos en la misma dirección para poder avanzar con paso firme y a la
vez crecer tanto de forma individual como de equipo.
Pero la verdad, encontrar empleados
o compañeros de trabajo ideales es una tarea absolutamente complicada y
difícil. No solamente nos debemos de fijar en que esta persona que viene al
equipo tenga talento, no, sino que también comparta una serie de valores y
podamos incluso a admirar su trabajo, y no, no es idolatría hacia tu compañero
o empleado y por supuesto que no es una invención mía, tenemos claros ejemplos de
CEOs en grandes compañías, como por ejemplo, Mark Zuckerberg también lo piensa
así, para que nos centremos, es el presidente, director ejecutivo y cofundador
de Facebook, “Sólo contrataría a alguien para que trabaje para mi si yo también
podría trabajar para esa persona”. O Jeff Bezos, que es el fundador de Amazon,
lo hace a través de preguntas claves en las entrevistas para seleccionar
personal: ¿Podrías llegar a admirar a esa persona? ¿Alcanzará esa persona el
nivel medio de efectividad del grupo de trabajo en el que va a entrar? ¿En qué
dimensiones podría llegar a convertirse en una super-estrella?
Ya no parece tan sencillo
¿Verdad? Pues el tema no acaba aquí, que tal si os digo que he llegado a leerme
libros de RR.HH. para poder contratar gente y que no fuese una cagada por mi
parte, pues es verdad, lo he hecho y la verdad, no me arrepiento, ya que además
de saber lo que yo quería para mis equipos, también llegaba a entender lo que
otras compañías requerían de mí cuando me integrara en sus equipos, de estas
entrevistas, pero sobre todo de los libros que he leído, he llegado a sacar una
especie de guía burros o puntos más interesantes sobre cada candidato:
- Importantísimo la personalidad del candidato, a través de preguntas. Si es alguien que la plantilla conoce de antemano, preguntarles a ellos, involucrarles en el proceso.
- Las habilidades o conocimientos que tiene están bien, pero ¿Qué potencial tiene? Es muy importante si queremos hacer un equipo resistente durante años.
- Hacerle preguntas sobre la empresa, para ver hasta qué punto está interesado.
- Dejarle hacer preguntas a él.
Pero mucho de lo que os he
contado, lo realiza un departamento, quiero entender que muy profesional salvo
raras excepciones o que tu empresa sea pequeña, aunque la última decisión lo
pone el supervisor o encargado de hacer el equipo.
Pero además de la entrevista de
trabajo, que es super importante, tendremos también la relación personal y el
Team Building, vamos a ver, aquí muchas veces tenemos el error y sobre todo en
el mundo de las obras, que es en el que yo me he movido todos estos años, que
el incentivar las relaciones personales, no significa que seamos los mejores
amigos de alma, pero sí que podamos en un contexto diferente al laboral podemos
llegar a tener una comunicación buena. Pero ojo aquí, esto no quiere decir que
hagamos actividades superficiales en las que se fuerzan a hacer algo con un
compañero con el que habitualmente no te hablas. No, así no, debemos hacer cosas
que resulten interesantes y que en sí mismas favorezcan las interacciones
voluntarias entre los compañeros.